Han pasado casi dos años desde que termine mi última relación duradera. Parece tan extraño pensar que hemos estado separados mas tiempo del que estuvimos juntos. Cuando empezó, pensé que finalmente había encontrado a esa persona. Pronto empecé a experimentar ansiedad y dudas luego de que muchas señales de advertencia empezaron a surgir. Yo anhelaba amar y compartir mi vida con alguien y me conforme con una relación toxica por casi un año, sabía que no debía sentirse de esta manera, pero me pareció tan triste y tan difícil dejarla. No sabía cómo soltar.
Date tiempo para estar mal
Cuando finalmente acepte el hecho de que necesitaba terminar las cosas, estaba devastada, a pesar de saber que era la mejor decisión. Recuerdo levantarme al otro dia y preguntarme cómo podría volver a sentirme bien de nuevo. No sentía alivio solo dolor. Me sentía culpable por haberlo lastimado y haberlo dejado. Me preocupaba que había dejado a la única persona que me había amado de esa manera y que nunca volvería a estar en una relación. Estaba orgullosa de haber hecho caso a mi intuición y haberme alejado de una pésima relación pero esa realización rara vez consolaba mi corazón roto.
Lo complicado de las relaciones toxicas es que a pesar de todo lo malo hay algo bueno. A veces suele verse solo al principio de la relación. O puede ser parte del balance entre los malos tiempos y las migajas de amor que te mantienen en la relación. Sin embargo, sin importar que tan pequeño sea hay algo que te hizo enamorar en primer lugar. Pienso en nuestros comienzos y si, hay cosas claras que no veía, pero también había mucha ternura y diversión. El confort de escuchar “te quiero” cada día y la apariencia de un futuro mejor para ambas. Estos buenos momentos, sin importar que tan pocos y espaciados hayan sido, hicieron que romper mi relación toxica fuera muy difícil.
Dale a tu corazón tiempo para sanar
Ahora, dos años después, sanación y distancia de por medio veo que aun me queda mucho por hacer. Aun tengo una imagen muy pobre de mi misma, especialmente en una relación amorosa. Estaba aun tratando de soltar y sanar de algunas cuestiones familiares y aprendiendo como tener voz en una relación de cualquier tipo. Parte del dolor que sentía era de creer que nunca volvería a conocer a alguien. Me torturaba durante semanas porque ese amor toxico era probablemente el mejor amor que me podían dar. Sentía en esos momentos que hasta ahí llegaba en este viaje que es el amor, pero ahora se que aun me queda un largo camino por delante. Encontrar el coraje para terminarlo fue la primera pagina del siguiente capitulo en mi habilidad de sentir amor por mi y por los demás en una forma saludable.
More Radical Reads: Letting Go of the Fantasy: 7 Ways to Heal Toxic Family Relationships
Identifica tus necesidades y resuélvete a satisfacerlas
Cuando apenas termine la relación necesitaba espacio. Quería que volvamos a estar juntos a las pocas semanas. Mientras que en mi corazón yo sabia que era una ruptura el veía que era una separación por un tiempo. Al principio no tenia la fuerza de decirle lo que en realidad era. Todavía lo amaba, aun cuando sabía que había tomado la decisión correcta y que el amor te obnubila. No sentía alivio al principio, pero cuando los días se hicieron semanas, empecé a sentirme más resuelta. Lo extrañaba, pero no extrañaba el caos, la duda y la ansiedad que sentía todos los días. Al cabo de un mes, le pregunte si podía ir a buscar mis cosas. Estaba enojado y me cancelo varias veces, no que no lo hiciera cuando estábamos juntos. Sin embargo, esta vez pude ver sus acciones sin los anteojos rosados de alguien que trata de salvar una relación rota. Sentí que me falto el respeto y eso alimentaba aún más mi resolución de que estábamos mejor separados.
Está bien decir adiós para siempre
Por un buen tiempo tenia la esperanza que pudiéramos ser amigos. No pudimos, lo intente muchas veces, pero siempre terminaba en mentiras. El me proponía que tengamos sexo o intentaba manipularme. Yo estaba resuelta a no seguir contentándolo más, así que eventualmente me di cuenta de que tenia que enfocarme en mi propia sanación y alejarme de él. Me sentía culpable por bloquearlo de mi vida, pero ero justo lo que necesitaba.
More Radical Reads: You’re Not Overreacting: 7 Ways to Avoid Being Gaslit When You Stand Up For Yourself
Aprende de tu corazón roto
Lo positivo de terminar mi relación toxica fue la lección que aprendí sobre mi misma y sobre el amor. Valgo mas de lo que me han ofrecido y mas de eso con lo que me conforme. Ninguna relación es perfecta, pero una relación sana debe estar atravesada por el respeto mutuo, la comunicación honesta, y el compromiso para crecer. Cuando me despojé de la toxicidad de mi relación estuve libre para empezar una relación conmigo misma. Pude darle amor y confort a mi rotura, rodearme del amor de mis amigos, y analizar lo que quería para una relación en un futuro. Agradezco el dolor que experimente porque me enseño lo que nunca mas quiero volver a sentir.
Ahora estoy en una relación amorosa con un maravilloso compañero, me siento esperanzada por nuestro futuro juntos, se que ahora soy lo suficientemente fuerte para alejarme sino estamos recibiendo o dando lo que necesitamos para crecer en el amor. He madurado en tantos aspectos desde la ruptura, pero el principal es haber encontrado la seguridad en mi misma para ser honesta sobre lo que siento y decirlo en el momento. Si mi pareja y yo tenemos un desacuerdo o yo me siento mal por algo, lo digo. No tengo miedo de las repercusiones por decir mi verdad. Somos capaces de discutirlo sin culpa o vergüenza. Nos cuidamos el uno al otro lo suficiente para asumir las buenas intenciones y entender que a veces percibimos las cosas diferentes debido a nuestro propio pasado. Estoy tan agradecida de que ambos hayamos decidido hacer nuestro mejor esfuerzo y todo lo posible para que el otro se sienta amado. No es un amor unidireccional ni ninguno de los dos juega con el otro, ambos estamos dispuestos a hacer nuestra parte y pedir disculpas si fuese necesario. Me siento mas capacitada para amar debido a mi relación toxica. Me ayudo a hacer el ejercicio que mi corazón necesitaba.
[Featured Image: A person with chin-length black hair quietly sits on a bus as they look down with a sad expression. They are wearing a dark parka. City lights are visible in the background. Source: Flickr.com/MartinCooper]
Share your thoughts
You must be logged in to post a comment.