Porque así es América: 5 cosas a tener en cuenta sobre Sexismo y Patriarcado 101 October 28, 2018 by Philippe Leonard Fradet Leave a Comment 8Share with your friendsYour NameYour EmailRecipient EmailEnter a MessageI read this article and found it very interesting, thought it might be something for you. The article is called Porque así es América: 5 cosas a tener en cuenta sobre Sexismo y Patriarcado 101 and is located at https://thebodyisnotanapology.com/magazine/porque-asi-es-america-5-cosas-a-tener-en-cuenta-sobre-sexismo-y-patriarcado-101/.CaptchaSubmitEstamos comenzando el año dándote las herramientas para discutir asuntos que afectan a la sociedad. La serie 101 TBINAA es un curso intensivo de género, sexualidad, raza y mucho más. Solo busca 101 y mira todo lo que hemos estado indagando desde entonces. Dentro de “The Body Is Not An Apology” hay una gran cantidad de trabajo alrededor de los tópicos de género, sexismo y patriarcado, además de un sinfín de temas que tienen que ver con el amor propio radical. He escrito muchos artículos para TBINAA en referencia al género, especialmente en torno al concepto de la masculinidad, el estereotipo del chico guapo, los hábitos alimenticios y la idea de ser tan grande como un hombre. Dos de los temas subyacentes que aparecen cada vez que escribo una de esas piezas o anima a alguien a comenzar una discusión en algo tan complicado como la masculinidad son el sexismo y el patriarcado. Todas esas veces me pregunto a mi mismo: ¿cómo afecta la masculinidad al sexismo y al patriarcado y viceversa? Hay formas muy básicas y comunes en las cuales el sexismo y el poder patriarcal calan en la vida diaria, así como a través de las normas sociales y creencias personales , muchas de las cuales, como era de esperar, tienen que ver con la cultura de la masculinidad en los Estados Unidos. Quiero aclarar esto diciendo que como alguien que se identifica como un hombre, no puedo decir que haya experimentado el efecto del sexismo y patriarcado de la misma manera que otros lo han hecho, más bien voy a discutir las formas en las que lo he presenciado, así como las formas que sé que otros experimentan a través de mis amistades, relaciones, discusiones, lecturas, etc. 1. Definiciones de Sexismo y Patriarcado. Empecemos definiendo estos términos. Dictionary.com define sexismo (n.) así: 1. actitudes o comportamientos basados en los estereotipos tradicionales de roles de género. 2. discriminación o devaluación basada en el sexo de una persona o su género, como oportunidades laborales restringidas, especialmente cuando esa discriminación va dirigida contra las mujeres. 3. perjuicio arraigado e institucionalizado en contra o el odio a las mujeres, misoginia. Aquí tenemos tres partes de una definición que clasifican para construir de cada una de ellas y acercarnos a cómo nosotros discutimos sobre el sexismo en TBINAA. En primer lugar tenemos una definición que hace alusión a algunas de las especificidades del sexismo que vemos en la sociedad, los aspectos más básicos del sexismo que están en el lado más perceptible. La segunda parte de esta definición es la que se construye de ahí: no solo son actitudes o comportamientos acerca de los estereotipos tradicionales de roles de género, también es discriminación pura y dura, dirigida principalmente a las mujeres. Ahora la última parte de la definición es la que nos toca la fibra sensible. El sexismo es perjuicio que está arraigado e institucionalizado u odio, lo que viene a decir que la discriminación y esas actitudes son parte de las normas de nuestra sociedad. Y específicamente en esta definición, directamente hacia las mujeres, emparejado a una palabra que resume esta idea: misoginia. Si bien esta es una muy buena definición de un concepto grandioso, todavía hay aspectos que se han pasado por alto, los cuales veremos en breve. Como Patriarcado (n.), Dictionary.com lo define principalmente como una familia, clan o tribu gobernada por un padre, o un hombre generalmente, donde los hijos varones toman automáticamente el poder a través de los herederos. Si bien esto proporciona la definición básica de patriarcado, son las dos últimas partes de esta definición las que nos interesan: 3. un sistema social donde el poder es sostenido por hombres, a través de normas culturales y costumbres que favorecen a los hombres y niegan oportunidades a las mujeres. 4. (a menudo letra mayúscula inicial) los hombres en el poder en una sociedad (normalmente precedidos por “el”). Aquí vemos que el patriarcado es similar al sexismo en base a que es un sistema social que beneficia directamente a un grupo (hombres) sobre otro (mujeres). De esta manera el patriarcado está mucho más extendido, simplemente en función de quién tiene el poder en la sociedad. No todos los aspectos de la vida en Estados Unidos son por naturaleza sexista, pero todo está afectado en gran manera por le hecho de que los hombres tienen el poder en la mayoría de los aspectos: negocios, economía, música, arquitectura, imagen corporal, normas alimentarias, incluso la moda. En patriarcado es entonces la manifestación de ese poder, son a la vez los hombres y sus seguidores los que promulgan sus poderes sobre todo y en todos. Por lo tanto el sexismo es un aspecto esencial del poder patriarcal, ¿qué mejor manera de asegurar que los hombres tengan el poder en la sociedad que difundir los ideales que automáticamente los hace el más respetado de los géneros? Los dos, sexismo y patriarcado, juegan mano a mano con el otro, y esos que suscriben esos ideales tratan de destruir a cualquiera que se atreva a oponerse a ellos. Juntos encarnan el terrorismo del cuerpo y la mente, tratando de garantizar que el poder se quede donde siempre ha estado. Estas dos definiciones por si mismas nos dan un gran punto de vista de cómo ver o no ver el sexismo en nuestro día a día. Sin embargo, hay algo que se echa en falta en los dos, pero sería difícil imaginar encontrar ese poquito que falta en una definición de diccionario. El sexismo y el patriarcado son más que experiencias distintas basadas en otras identidades que alguien maneja, especialmente en términos de raza, así como transexuales e identidades de géneros disconformistas. 2. El adoctrinamiento y la institucionalización del sexismo y el patriarcado dentro de los Estados Unidos. No es difícil encontrar ejemplos de formas de sexismo que han sido adoctrinadas e institucionalizadas a lo largo de los años en los Estados Unidos. Si bien, acorde con fuentes etimológicas, el término “sexismo” no existiría hasta después de los años 50, lo cual es divertido porque es una de las décadas con típicamente consideramos como más caracterizadas por el sexismo, su existencia, con la ayuda de normas patriarcales, fue notable mucho antes. Durante los primeros 150 años de existencia de este país, ninguna mujer tuvo derecho a votar. Este es uno de los grandes ejemplos de sexismo y bastante literal, del patriarcado: los hombres tenían el control absoluto sobre las decisiones gubernamentales que ocurrieron en nuestro país durante siglo y medio. Aquí es donde la primera ola de feminismo entró en escena. La primera ola se usa para describir a mujeres en las primeras décadas del siglo XX, que sintieron que ellas debían tener los mismos derechos y oportunidades que los hombres, desafortunadamente esta ola de feminismo consistía solo en mujeres blancas, y cuando el derecho a voto fue finalmente concedido a la mujer, solo las mujeres blancas fueron capaces de obtener ese beneficio en las décadas venideras. A pesar del resultado racializado del movimiento sufragista de las mujeres, la falta de acceso a los derechos de voto en absoluto es un buen ejemplo del sexismo básico que existía en los Estados Unidos. La primera función del sexismo y el patriarcado es clasificar a la mujer como inferior. Decir que las mujeres no están capacitadas para votar o tomar decisiones políticas importantes, que no deberían permitir que tuvieran los mismos cargos que los hombres, que las mujeres sólo deberían ser amas de casa, que esas mujeres deben ajustarse a diferentes, a menudo humillantes, estilos de ropa y de comportamiento, esas mujeres no pueden tomar decisiones por si mismas, que son mujeres incompletas sin un hombre e hijos en sus vidas, etc, etc., es considerar a las mujeres inferiores a los hombres. Este es el sentimiento general, esa inferioridad que dicta la forma en que las mujeres son tratadas en los Estados Unidos. Se adoctrina en la mentalidad no solo de los hombres, sino en la de todos a través de la forma en la que hablamos a las mujeres en el colegio, cómo son tratadas en sus lugares de trabajo, cómo se espera que actúen y así sucesivamente. 3. Las actitudes, comportamientos, prejuicios y odio cultivado del sexismo y el patriarcado. Con el adoctrinamiento de la inferioridad de la mujer firmemente establecido en las masas, el siguiente paso en la eliminación total de algún juicio y humanidad en las mujeres es a través de acciones que varían entre descarado y físico y microagresivo y lleno de matices. Como he comentado en un artículo sobre el tópico del buen tipo, el tirador de Isla Vista en 2014 ofrece un ejemplo bastante aleccionador de cómo las actitudes y prejuicios de uno contra las mujeres se puede volver en violencia y ser fatal para otros. Para aquellos que no saben de lo que hablo, un chico de 22 años en Isa Vista, CA, la residencia universitaria cerca de la Universidad de California, Santa Barbara, mató a seis personas después de publicar un manifiesto en Internet. En este manifiesto comentaba la forma en que el sentía que era tratado sin respeto por las mujeres porque no querían salir o acostarse con él, diciendo que era vergonzoso ser virgen a los 22, a pesar de que sentía que era un buen tipo. Este es un ejemplo perfecto de las creencias sociales que dicen lo que las mujeres deberían hacer por los hombres, acostarse con ellos cuando quieren, especialmente si es buen chico, y las frágiles y todavía normas tóxicas de masculinidad crean un peligroso, y a veces fatal, ambiente para las mujeres por lo general. Porque la idea de que las mujeres son muy inferiores a los hombres sigue a la fuerza su camino hacia la modernidad, esta clase de situaciones donde las mujeres son tratadas como objetos sexuales o disponibles son demasiado comunes. Nuestra cultura ha cultivado la idea de que las mujeres deben cumplir con ciertos ideales que eliminan su sentido de la voluntad y es a veces contradictorio. Esto significa que se espera que las mujeres sean a la vez puras y célibes pero también que estén disponibles para cualquier hombre que quiera tener sexo con ellas. Se espera que las mujeres se disculpen por chocar con ellas. Se espera que las mujeres se vistan y se maquillen de cierta manera, sin repetir el mismo conjunto para no parecer descuidada, o sin demasiado maquillaje para no parecer una fulana. Abochornar a la zorra, cultura de la violación, gordofobia, estos son ejemplos de formas de patriarcado y sexismo que tratan de encajar a la mujer en una idea cerrada de lo que es aceptable, que solo se debe a una cosa: el odio hacia las mujeres, la forma de actuar el terrorismo del cuerpo. Esto no solo viene de los hombres, el sexismo internalizado a menudo conduce a las mujeres y a otras personas que perpetúan estas expectativas en lugar de cuestionarlas y trabajar para desmantelarlas. Los siguientes puntos, ambos merecedores de sus propios artículos 101, ahondan más en la gente de diferentes identidades que específicamente experimental el sexismo y el patriarcado en su día a día. 4. Misoginia por racismo y sexismo racializado. Una búsqueda rápida en la Wikipedia nos da la definición de misogynoir. Este término, acuñado por Moya Bailey, fue creado para hacer ver las formas en que las mujeres negras experimentaban la misoginia. Su idea aquí era observar las formas en que el racismo y el sexismo se cruzan, trabajando juntos para una mayor y más fuerte opresión a la mujer negra basada en la representación en los medios y normas culturales. Esto apunta a un análisis interseccional muy necesario en la discusión del sexismo y el patriarcado. Debemos mirar cómo el racismo y el sexismo trabajan mano a mano para derribar y deshumanizar a las mujeres de color en los Estados Unidos. En la superficie, esto se encuentra en los estereotipos racializados de mujeres de color.: las mujeres negras deben ser chillonas, ostentosas, descaradas, violentas, y hacen referencia a veces al grupo menos atractivo de mujeres, a menudo por hombres negros. Las latinas son estereotipadas como fogosas, exóticas, picantes y muy a menudo se espera de ellas que sean extremadamente promiscuas. Las asiáticas, sobre todos del Este de Asia, son mujeres que asumen que van a ser exóticas y salvajes, a menudo asociadas con geishas japonesas, o se espera que sean completamente sumisas y mansas. Todos estos tópicos son ejemplos demasiado comunes de las formas en que las mujeres de color están sometidas al poder del patriarcado y el sexismo. 5. Transfobia y heteropatriarcado. A lo largo de este artículo me he referido principalmente a las mujeres como el grupo más afectado por sexismo y patriarcado, como mujeres, refiriéndome a transexuales, fueron los temas principales en las definiciones originales de estos términos. Sin embargo, la discusión sobre el sexismo ha crecido para incluir a otros muchos grupos de personas, y con razón. Aquí tenemos dos términos importantes que han sido construidos en la discusión de sexismo y patriarcado: transfobia y heteropatriarcado. Cis-sexism, o transfobia, es sexismo dirigido contra personas no-cisgénero, así que cualquiera que se identifique como trans, no conforme de género, genderqueer, agénero, etc. Esta forma de sexismo implica gran parte de los mismos aspectos de adoctrinamiento, institucionalización, actitudes y odio que comentamos normalmente con sexismo contra mujeres cis. Sin embargo, el sentido subyacente de este adoctrinamiento y odio es la herencia en la creencia de que las personas que no son cisgénero son raras, anormales, despreciables, o mienten en relación a su identidad de género. El heteropatriarcado, similar a la forma de patriarcado que hemos comentado antes, es una forma mucho más masiva de creencias cis-sexistas, que se extienden a otros miembros de la comunidad LGBT, notando comportamientos que no están en línea con las conductas heterosexuales: matrimonio, procreación, etc., normalmente se ve como anormal y equivocado. Es un punto que estamos viendo con más y más fuerza, como con la legalización del matrimonio gay, en lugar de tener comunidades trabajando duro para luchar por los derechos de los trans y género no-conforme, como seguridad en el trabajo, vivienda y servicios sanitarios. Si bien esta lista intenta cubrir todas las formas que vemos de sexismo y patriarcado (y transfobia y heteropatriarcado) educa sus feas cabezas en nuestra sociedad, está lejos de ser un análisis completo o discusión sobre estas ideas. The Body Is Not An Apology tiene muchos otros artículos que comentan sexismo, patriarcado, masculinidad tóxica, misoginia, transfobia, heteropatriarcado y un montón de otros asuntos relacionados. Es importante que todo aquel que lea este artículo tenga el tiempo necesario para leer otros artículos, especialmente los de la serie 101, para ayudar sobre la discusión del terrorismo al cuerpo y el aumento del amor radical a uno mismo, y cambiar la manera en que pensamos acerca de todos estos términos y fobias sociales que experimentamos día a día. [Foto principal: Dos hombres sentados a una mesa haciendo un pulso. Hay dinero en efectivo debajo de los brazos. Se trata de una imagen en blanco y negro con la mitad de las caras cortadas.] Traducido por Ana Maroto 8